Siguiendo la actividad propuesta por el profesor Ricardo Fernández, he decidido estar un día sin el teléfono móvil.
Sería una tontería fingir que el teléfono móvil no crea adicción y dependencia, así que me ha parecido un buen experimento pasar un día entero sin el móvil.
Me hubiese gustado desconectarme totalmente, pero por motivos personales no he podido apagar el móvil por completo, así que me he limitado a quitar la WiFi y los datos móviles, y dejarle retirado para no cogerle, salvo en caso de emergencia.
Lo hice ayer, y fui apuntando en un papel lo que sentía en diferentes momentos del día, para seguir un control. Dejo a continuación estas anotaciones:
10:00 - Ha sido raro no mirar el móvil al levantarme ni al desayunar. No ha empezado el día y ya me estoy arrepintiendo de hacer este "reto".
11:30 -Voy a comprar al supermercado, así que en lugar de llevar el móvil con la lista de la compra me la he escrito en un papel, como cuando era pequeña. No he echado de menos el móvil e incluso he comprado más rápido de lo habitual.
14:30 - Me ha costado resistirme y no mirar el móvil antes de comer, como de costumbre. Al menos mientras coma puedo ver la tele y conectar con el mundo exterior.
16:00 - Normalmente a estas horas estoy chateando o viendo las redes sociales, así que no sé muy bien qué hacer ahora.
16:15 - Al final me he puesto música de la radio para pasar el rato.
17:00 - Han venido mis primos pequeños a buscarme para irme al parque a jugar con ellos. Lo mejor que me podía pasar en el día de hoy, porque podemos decir que tengo mono de teléfono móvil.
20:00 - Estando con mis primos me he olvidado por completo del móvil, pero al volver a casa necesito mirarlo. Pero voy a resistir, menos mal que ya queda poco.
21:00 - He estado hablando con mi familia todo este tiempo, y (casi) no he pensado en mi móvil.
21:30 - Durante la cena nos ha surgido una duda sobre la edad que tiene un actor. No he podido googlearlo como suelo hacer, así que mi hermana se ha encargado de hacerlo.
22:00 - Voy a ver una película en la tele ya que no puedo ver vídeos en YouTube. Para cuando acabe podré coger por fin el móvil.
00:00 - Nunca he cogido con tanto deseo mi teléfono.
RETO SUPERADO
Al terminar el experimento he podido comprobar (mejor dicho, confirmar) que tengo dependencia al móvil. Aunque no esté las 24 horas del día mirándolo, siempre lo tengo a mano por si me escriben mensajes, o yo misma necesito escribirlos; por si me llaman o necesito llamar; para echar un vistazo a las redes sociales o para buscar datos curiosos que me surjan a lo largo del día.
A pesar de que he sufrido un poco con este reto, me ha gustado la experiencia de estar desenganchada del teléfono, aunque no volvería a repetirlo.
Sí que es verdad que, por ejemplo, cuando voy a la playa, estoy mucho más desconectada del teléfono y me olvido más de él. Pero esta vez ha sido la única en la que no lo he tocado en todo el día.